 En puertas de una nueva Semana Mayor, nuestra Hermandad celebra un solemne Triduo en Honor de nuestro Titular, el Santísimo Cristo de la Redención. Estos cultos finalizan como es habitual con una Solemne Función Principal que tiene lugar el Domingo de Pasión. En esta ocasión, fue, el recién llegado a nuestra parroquia el Rvdo. P. D. Guillermo Alberto Hernandez, el encargado de oficiar estos Solemnes Cultos, el cual fue capaz rápidamente de encajar con todos los que nos congregamos estos días en el primer templo parroquial y brindarnos homilías repletas de contenido espiritual. Como cada año, la comisión de mayordomía colocó, a la izquierda del presbiterio, un altar efímero con la Sagrada Imagen del Santísimo Cristo de la Redención. En esta ocasión, a nuestro habitual altar portátil, se le cambió el fondo por uno de damasco en tono granate, sobre este, la cruz con el sudario alumbrado con candelabros de color tiniebla. A los pies de este, la imagen de nuestro Titular sobre un túmulo, se alumbraba con cuatro hachones, igualmente con cera de color tinieblas. Se exornaba el catafalco con un friso de flores moradas y blancas. Todo el conjunto brillaba por su corte romántico, muy en la línea de nuestra Hermandad. El día 4 de abril, tras la eucaristía, tuvo lugar un Solemne Via Crucis con la imagen del Santísimo Cristo de la Redención. El ejercicio estaba previsto realizarlo por las calles de la feligresía, pero desgraciadamente, debido a las inclemencias meteorológicas, la Junta de Gobierno decidió realizarlo en el interior del templo, lo cual no resto solemnidad. Al siguiente día, durante toda la jornada, estuvo expuesto en Solemne Besapies la imagen de nuestro Titular. Durante todo el día numerosos fieles se acercaron por nuestra sede canónica a besar los pies y orar ante nuestra sagrada imagen. El Besapiés se cerró tras la eucaristía del último día del Triduo. A la finalización tuvo lugar la imposición de veneras a los nuevos hermanos. Para cerrar estos Solemnes Cultos Cuaresmales y como es tradicional, el domingo de pasión celebramos una solemne función. A la misma acudieron numerosos hermanos y algunos representantes de Hermandades de la ciudad. A la finalización de esta, todos los que así lo desearon, nos desplazamos a los salones de Salinas San Vicente para disfrutar de la comida de Hermandad y compartir unos agradables momentos de verdadera fraternidad. GALERIA FOTOGRAFICA:
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