A pesar de la grave situación que atraviesa nuestro país debido a la pandemia de COVID-19, nuestra Hermandad, siguiendo estrictamente la normativa y recomendaciones de las autoridades sanitarias, celebró el tradicional Triduo de final de octubre en Honor y Gloria de Nuestra Señora de la Soledad. Estos cultos concluyeron con la Solemne Función Principal de Instituto del día de Todos los Santos. Fueron sin duda unos cultos atípicos, lejos de lo que estamos acostumbrado, pero que sin duda alguna, dejaron estampas inéditas como la presencia de nuestra bendita Titular en el altar mayor de nuestra sede canónica.

Debido a la imposibilidad de realizar el arraigado besamanos a Nuestra Señora de la Soledad, la Junta de Gobierno decidió entronizar a nuestra Sagrada Titular, en el altar mayor de la Iglesia Mayor Parroquial, bajo los pies del crucificado que preside el presbiterio. De esta forma, fue vestida para la ocasión por D. Juan Guerrero Pérez con la saya y manto malva y plata bordado por Dña. Maria de los Angeles Arce Cobo. Sobre su sien se coronaba con la diadema de plata de los talleres de Angulo, y en sus manos el ramillete plata de azahar y el pañuelo donado por el Excmo. Sr. Marques de Varela de San Fernando. Se exornaba el conjunto con dos jarras con flores en tonos blancos. Una histórica imagen, nunca vista, que quedará para siempre en el recuerdo de todos los hermanos de nuestra corporación.

Estos solemnes cultos fueron oficiados por el Rvdo. Padre D. Guillermo Alberto Hernández, misionero en Venezuela y que se encuentra unos días en nuestro país por motivos familiares. El padre Guillermo, ya nos acompañó hace unos años en los cultos cuaresmales, guardamos un grato recuerdo de su paso por nuestra familia soleana, y por ello, aprovechamos su visita, para pedirle que oficiara estos cultos. Ruego que acepto con sumo gusto.

Con un trato cercano y afectivo, conecto rápidamente con todos los que compartimos con él estos días, con palabras sencillas y llenas de contenido espiritual hacia Nuestra Señora de la Soledad.

El 1 de Noviembre a las 11:00h tuvo lugar al Solemne Función Principal de Instituto, función que estuvo marcada por las restricciones sanitarias a las que estamos obligados, y a la que asistieron representantes de las Hermandades de la Parroquia, así como del Consejo local de Hermandades y Cofradías y de la Corporación Municipal. En el trascurso de la misma los hermanos que así lo desearon realizaron la pública potestación de fe, que marca nuestros estatutos, y a la finalización tuvo lugar la entrega de diplomas a los hermanos que cumplían 25 años como hermano de nuestra Corporación.